• Así entretiene sus ocios hasta que haya un nuevo Gobierno que le permita vender el conjunto de Endesa.
  • Como ya adelantó Hispanidad, Guindos ha paralizado la venta de la eléctrica.
  • Al final, todo acaba en la misma bolsa: en la de Enel.
  • Y encima, Borja Prado tiene la caradura de plantearlo como una inversión.
El vaciamiento de Endesa no ha concluido. El último paso que ha dado Enel es obligar a la empresa española a comprar el 60% de Enel Green Power España (EGP España) que todavía está en manos de los italianos. Estamos hablando de 1.678 MW de potencia consolidada en más de 100 instalaciones de energías renovables, sobre todo eólicas. Es decir, obligan a Endesa a vaciar un poco más su caja para comprarles el 60% de EGP España. Al final, todo acaba en la misma bolsa: en la de la empresa estatal Enel. Pero no hay que olvidar el objetivo final: vender Endesa. Con la operación anunciada este miércoles, Enel entretiene sus ocios hasta que haya un Gobierno que le permita colocar el conjunto de la empresa. Candidatos no faltan, como les hemos venido informando en Hispanidad. Lo cierto es que, como les adelantamos también en estas pantallas, el ministro en funciones, Luis de Guindos, ha paralizado la venta de la eléctrica. Mientras este Gobierno esté al mando, Endesa no se vende. Sea como fuere, el presidente de la eléctrica, Borja Prado (en la imagen), ha tenido la caradura de plantear la operación como parte de la estrategia de inversión en nuestro país, cuando en realidad no es otra cosa que más vaciamiento de la compañía. Y un último detalle: Endesa asegura en el hecho relevante remitido a la CNMV, que en una negociación de estas características (Enel posee el 70% de Endesa) las decisiones "se adoptan exclusivamente por los consejeros independientes, sin la participación del resto de los miembros del órgano de administración". Ya. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com