La podemita Yolanda Díaz presume de proteger a las personas trabajadoras… Sin embargo, la realidad no es tan bonita como parece: la información de una ayuda especial llega a una posible receptora el pasado 3 de diciembre, tres días después de que acabe el plazo (30 de noviembre).
En la carta (que pueden ver en el documento adjunto), la ministra de Trabajo y Economía Social afirma que su Departamento “ha desplegado todos los recursos a su alcance para proteger a las personas trabajadoras. Ha sido nuestro principal objetivo y preocupación y a ello hemos dedicado todos los esfuerzos”. Aunque claro, reconoce que estos esfuerzos, “dado lo excepcional de la situación, no siempre resultan suficientes”.
La ministra podemita Yolanda Díaz tutea a la posible receptora, informándola de que como ha agotado su prestación por desempleo en pleno estado de alarma, se ha regulado una ayuda especial “que pretende compensar, durante tres meses, esa ausencia de ingresos a la que tú o tu familia os habéis tenido que enfrentar”. Una ayuda especial que tiene una escasa duración (tres meses) y cuya cuantía tampoco será para tirar cohetes (inferior a 300 euros).
Y cómo no, la solicitud hay que tramitarla a través del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), como está poco saturado (gestiona las prestaciones por desempleo y las solicitudes del Ingreso Mínimo Vital -IMV- que está siendo un auténtico caos)… Ofrece la posibilidad de hacerlo de forma online o bien presencial (con cita previa pedida por la web o por teléfono).
La ministra Yolanda Díaz acaba la misiva con bastante cursilería: “Tan sólo quiero mostrarte todo mi apoyo personal y el de este Ministerio, en una situación tan complicada”. Un apoyo que suena a risa, teniendo en cuenta que la carta tiene fecha del 6 de noviembre y llegó a la destinataria el 3 de diciembre, cuando el plazo para solicitar la ayuda especial había vencido. Y por si lo anterior no bastara, Díaz añade: “Todo lo que esté en nuestra mano para proteger a las personas trabajadoras y a las familias de este país. Un fuerte abrazo”. ¡Olé!