A partir del próximo 25 de abril, tras la Junta de Accionistas, Antonio Zoido será presidente no ejecutivo de Bolsas y Mercados Españoles (BME), después de 17 años ejerciendo como máximo ejecutivo de la compañía. A partir de esa fecha, el CEO, Javier Hernani, asumirá todo el poder en el grupo, según el comunicado remitido este lunes por la compañía.
Zoido deja una compañía solvente, independiente, con beneficios recurrentes, pero sin un horizonte claro de crecimiento. Lo cierto es que esa es la tónica del resto de bolsas europeas tras las fusiones frustradas que han abordado durante los últimos años. Fusiones en las que BME no participó y, a la vista del resultado, con acierto.
México y Argentina no tienen una bolsa potente, pero Brasil sí es un jugador a tener en cuenta
Una de las tareas que se encontrará Hernani encima de la mesa será el desarrollo de Latibex, el embrión del mercado natural de BME, esto es, el mercado hispanoamericano. Sí, es cierto que México y Argentina no tienen una bolsa potente, pero Brasil sí es un jugador a tener en cuenta.
El cambio implica una reducción significativa en la retribución de Zoido que, en 2018 ganó 1,4 millones de euros. A partir de ahora, su remuneración estará más cerca de la del resto de consejeros no ejecutivos. Hernani, por su parte, verá aumentada remuneración, que en 2018 alcanzó los 979.000 euros.