(9-XI-2000)
Jesús:
¡Esa caja de podredumbre que a todas horas abrís para que inunde con su hedor las estancias más íntimas de vuestra casa (la TV)! Que contagia y contamina a todos con sus criterios de muerte, con sus imágenes de vicio absoluto. Que corrompe las mentes y conciencias de los más pequeños. ¡Responsables vosotros de ello, que la abristeis sin rigor, sin tener en cuenta el daño que os hace y hace a vuestros pequeños vástagos. ¡Apagad ese aparato de muerte si queréis que en vuestras casas reine la santidad!