Lo raro es el pecado. Dios quiere gente normal, no rara, en un mundo normal
Virgen María (6-V-2011): Amada mía: no queremos que os comportéis como raros. Queremos gente normal en un mundo normal. Lo raro es el pecado. Queremos vuestra vida libre de pecado. Y que ésa sea vuestra alegría. Queremos que, de vuestros ojos, se des prenda el amor. Hija mía alégrate de en tu vida sufrir el desamor.