Resulta curioso cómo se gestó este documental, que tiene visos de convertirse en una de las películas más premiadas del año. Cuando era niño, los padres del actor Miguel Ángel Muñoz, debido a sus obligaciones laborales, recurrieron para que le cuidara a Luisa Cantero, “Tata”, que era nada menos que la hermana de su bisabuela. A partir de ahí se inició una relación entre ambos llena de amor que ahora vemos en la pantalla grande. El motivo es muy sencillo; el actor, muy agradecido pero dada la avanzada edad de Tata, decidió disfrutar junto a ella haciendo todas aquellas cosas que tenían pendientes: como una road trip o rodar una película juntos. Cuando llegó la pandemia, Miguel Ángel optó por irse a vivir a su casa, un pisito de 35 metros cuadrados, para cuidarla y acompañarla en unos momentos tan duros, desconociendo que la experiencia se alargaría hasta tres meses.
Así, se convirtieron, durante el confinamiento, en una de las parejas más viscerales de internet, porque la convivencia llena de alegría y cariño que mantuvieron esos 100 días el actor Miguel Ángel Muñoz (38 años) y su “Tata”(97) traspasaba las pantallas y llegaba a las casas a través de las redes sociales, en lo que se conoció como la “Cuerentata”.
Narrado en primera persona, se trata de un trabajo emotivo, pero muy simpático donde descubrimos el carisma de dos personas muy distintas entre sí pero que se complementan gracias al cariño. Una historia que, además, se convierte en todo un homenaje a esos mayores que se han pasado la vida cuidando a los demás, con una vocación de servicio ahora inexistente entre las nuevas generaciones. Pero también es una llamada de atención al cuidado de los dependientes, a la gente anciana que ha sido la más golpeada en la pandemia. Por el contrario asistimos a lo bien que les viene estimularles con actividades variadas.
En este documental Miguel Ángel muestra la mejor cara de ambos y, sin pretenderlo, también este trabajo es un excelente documento para recordar los meses en los que España se paró, y las calles se quedaron vacías por una decisión política, no entra en el debate de si esa medida fue correcta o no.
Para: Los que quieran ver un simpático y emotivo documental lleno de humanidad.