Inspirado en un doble asesinato ocurrido en Córcega en 2017. Hafsia Herzi interpreta a una guardiana de prisiones, muy contradictoria, que empieza a trabajar en un centro penitenciario un tanto diferente a los demás. Allí, realmente los presos son los que controlan a los funcionarios y no al revés. Melissa, que se siente muy sola, logra integrarse gracias a Saveriu, un joven recluso muy influyente, pero esa relación peligrosa le pasará factura. 

La complejidad del alma humana es el asunto que más interesa al director belga Stephane Demoustier, lo dejó claro en su aclamada "La chica del brazalete" (2021) y lo vuelve a hacer en "Borgo".
En "Borgo" queda claro que una persona cabal que trata con delincuentes diariamente puede normalizar la percepción y desconfianza que siente hacia esos reclusos, viéndolos incluso como seres corrientes, pero da un paso más; sin pretenderlo puede cambiar sus circunstancias vitales y transigir con algo que nunca pensó.
Rodada en una cárcel real abandonada, para dar más autenticidad a la historia, "Borgo" mezcla elementos de thriller carcelario y policíal con drama social, puesto que la protagonista es una mujer con graves problemas financieros debido a la precariedad laboral de su marido y a que tiene que mantener a dos hijos pequeños. Una circunstancia que no es eximente pero sí que hace que se entienda su abatimiento pero también su vulnerabilidad ante seres humanos mucho más perversos.

Sobre la actriz Hafsia Herzi, de origen argelino y tunecino, reposa el peso de la historia y ella lo resuelve perfectamente, con una actuación repleta de matices. 

Para: los que les gusten las películas de calidad.