El horror de vivir bajo la sharía (la ley islámica), que implantaron a la fuerza los talibanes en Afganistán, se plasma con crudeza y poesía, al mismo tiempo, en esta magistral película de animación donde en medio de la tragedia surge el sacrificio y la esperanza.
En el verano de 1998, los habitantes de Kabul sufren bajo el dominio talibán. Zunaira y Mohsen son dos jóvenes que se conocieron y enamoraron en la universidad. A pesar de las penurias que sufren a diario, debido a la irracionalidad del integrismo islámico, sueñan con un futuro mejor. Pero, un día, una acción inesperada da un giro terrible a sus vidas.
Tomando como base el best seller de Yasmina Khadra (con más de 600.000 ejemplares vendidos en Francia), este largometraje de animación da un giro a lo que normalmente se hace en ese terreno porque, en lugar de que los actores trabajen al servicio de gestos y expresiones predeterminadas de los dibujos, aquí los personajes animados tuvieron que transmitir la interpretación de los actores. Para que eso funcionase, y resultará muy auténtico, se concretó en dos fases; primero unas sobresalientes interpretaciones, que corrieron a cargo de actores de prestigio, y luego un dibujo hiperrealista que pudiera transmitir, con rigor y perfección, la fisonomía y movimientos de esos personajes, que al final fue realizado por una de las directoras, Eléa Gobbé-Mévellec, quien ya había trabajado como animadora en la encantadora Ernest & Celestine.
El desarrollo de la historia describe como se sobrevive bajo la dominación de un régimen salvaje, todavía más cruel para las mujeres si éstas han recibido educación. La película está plagada de imágenes poderosas pero también emotivas. Lo asombroso es que esos sentimientos se trasmiten a través de unos dibujos en 2D, aparentemente realizados en acuarela y con muy pocos trazos y que resultan dinámicos.
Porque si en el año 2008 quedamos impresionados por La verdad de Soraya M, una película, inspirada en hechos reales, que narraba la muerte por lapidación de una mujer por el deseo de su marido de tomar una esposa más joven, los hechos que se narran en Las golondrinas de Kabul no son menos pavorosos.
Para: jóvenes y Adultos que quieran reflexionar sobre la irracionalidad del integrismo islámico.