El argumento de esta comedia familiar puede “sonarles” porque versiona uno de los clásicos del cine familiar francés del siglo XX: El juguete (1976) de Francis Veber, que también tuvo réplica estadounidense en Su juguete preferido, dirigida por el competente director Richard Donner, en el año 1982.
“Cuando eres rico no tienes amigos”, esa frase pronunciada por el pequeño coprotagonista de esta película ya nos indica lo solo que se siente un menor, a pesar de ser el hijo de uno de los hombres más adinerados de Francia. Malcriado, no es extraño que, como regalo de cumpleaños, se pida al vigilante de los Grandes Almacenes de su padre, saltándose a la torera que los hombres, en la actualidad no se compran. Como se saldrá con la suya, ante la necesidad económica de “su juguete” (que necesita con urgencia dinero porque va a ser padre de familia), la historia dará lugar a un sinfín de situaciones divertidas.
A pesar de no encontrarnos ante una historia original el cineasta británico James Huth ha logrado una película entretenida que incluye, de forma amable, la misma denuncia que las dos propuestas anteriores: el dinero no puede suplir nunca la ausencia de los progenitores y éstos, a pesar de sus ocupaciones, deben priorizar el pasar tiempo con sus hijos, porque crecen y esa relación nunca volverá atrás. De ahí que, aunque suene tópico, si que se entiende en esta película la frase “Pobre niño rico”.
La película se desliza bien y actualiza el argumento incluyendo toque sociales de la sociedad francesa donde los inmigrantes cada día tienen más peso y la irrupción de las redes sociales en la vida cotidiana. Cuenta en el reparto con el cómico Jamel Debbouze (Premio al mejor actor en el Festival de Cannes por su labor en Indigènes) y al veterano y todoterreno Daniel Auteuil, mientras destaca el buen trabajo del adolescente Simon Faliu, quien está muy creíble en el papel de ese niño insoportable, deseoso de ser querido
El nuevo juguete también critica el neocapitalismo rampante que reina en EEUU y Europa, donde el trabajo empieza a ser un bien preciado y escaso.
Para: los que les gusten las comedias familiares o los que quieran compararla con la versión americana de los años 80.