En un edificio de tres plantas viven tres familias, a lo largo de diez años todos ellos se verán enfrentados a unos conflictos que tendrán repercusiones en sus vidas. El director italiano Nanni Moretti, con títulos tan reconocidos como La habitación del hijo o Caro Diario, analiza las relaciones entre padres e hijos, hermanos, maridos y esposas, en un drama que nos convierte en “mirones” de lo que sucede puertas adentro de unos hogares.

Moretti se ha basado en la novela de Eshkol Nevo “Tres pisos arriba” para abordar temas universales de calado, sobre todo referidos a la responsabilidad y decisiones que hay que tomar cada día como padres, que derivan en acciones muchas veces incorrectas debido al miedo o la incertidumbre sobre lo que les puede pasar a nuestros hijos. Igualmente mira a la pareja, a la dificultad de la convivencia diaria, en la que en la mayoría de las ocasiones uno de los dos “tira” de la relación.

De este cineasta siempre he admirado que no se anda con paños caliente a la hora de enfrentarse a cuestiones complejas, aquí se atreve a hablar de los problemas mentales en seres queridos, que pueden destrozar cualquier familia, de una educación incorrecta que puede dar lugar a vástagos resentidos y violentos, de la desconfianza entre amigos y vecinos etc…

Los actores italianos suelen ser naturales, y sus actuaciones resultan frescas, Nanni Moretti ha realizado un buen casting y él mismo se ha reservado uno de los papeles más difíciles; el de un juez a quien, en pequeños trazos, describe como una persona autoritaria  y, sin embargo, no puede controlar a su único vástago.  Quizás, esa historia es la única que en algún momento resulta incomprensible y demasiado “blanda” al mostrar el comportamiento errático del hijo, al que justifica incluso en sus peores momentos.

Porque el resto del  reparto coral, y sus motivaciones, donde cada personaje tiene sus momentos de gloria y debilidad, resulta muy creíble. Como es usual en Moretti, la cámara la desliza de un piso a otro, y de una historia a otra, con una facilidad pasmosa, logrando lo que pretende: una página de la historia cotidiana de unas familias que podrían ser nuestros vecinos de al lado.

Para: los que les guste Nanni Moretti y sus películas. Los que sean curiosos sobre lo que ocurre dentro de las familias, que ninguna es perfecta.