Dirigido por un francés, Jacques Audiard, y basado libremente en una novela del canadiense Patrick deWitt, Los hermanos Sisters enlaza por su contenido con los western de los años 50 y 60, definidos como crepusculares, donde tenía un peso importante la descripción de la personalidad de sus protagonistas.
Año 1851. Charlie y Eli Sisters son una pareja de pistoleros, dos hermanos que trabajan a sueldo para El Comodoro, un cruel y poderoso individuo. Son muy diferentes, a pesar de no conocer otra vida, mientras que el líder de los dos, Charlie, es alcohólico y está encantado con lo que hacen, el hermano mayor, el tímido Eli, sueña con tener una vida normal. Su última misión, encontrar a un hombre que, en plena fiebre del oro, parece tener un secreto único para encontrar el preciado bien, les pone contra las cuerdas sobre su presente, su futuro... y lo que a ambos les une.
Rodado en España (en parajes naturales de Almería, Navarra y Aragón) y Rumania, durante su desarrollo volvemos a disfrutar con los elementos fundamentales del Oeste: un hombre, un caballo y un revolver, poniendo el acento en el conflicto entre ambos hermanos debido a su dispar perfil psicológico. Interpretados por Joaquin Phoenix (Her, Puro vicio) y John C. Reilly (Langosta, Un dios salvaje), éste último está inmenso en su actuación gracias a un personaje inolvidable; su mérito incluso es mayor si tenemos en cuenta que él y su esposa, la productora Alison Dickey, fueron los que impulsaron el proyecto.
No nos encontramos ante una visión épica del Oeste, pero no por ello menos atractiva, porque se ahonda en la búsqueda de sentido de cualquier hombre. De ahí la importancia que se concede a esa utopía de una sociedad “socialista” (ideas muy en boga a finales del pasado siglo XIX), a la que aspira la otra pareja del film: el químico que sabe encontrar oro y el detective que le acompaña. El debate sobre esa imagen idílica, queda para los espectadores.
Otro elemento interesante es que sitúa, como nos decía su director, “a ras de suelo a los hombres que cabalgaban por el Oeste”. Aunque el mejor personaje de la trama es Eli Sisters, que rompe la tradición de lo que en el cine clásico era un pistolero, un hombre duro e implacable, dotándole de una sensibilidad que desarma; la escena con la prostituta así lo atestigua.
Eso sí, la película es violenta.
Para: los que les guste el género del western y les agrade ver como se hacen películas originales dentro de ese género cinematográfico.