En 2018 lanzará una plataforma para su canal deportivo ESPN y en 2019 hará lo propio con los contenidos que tiene ahora en Netflix. La muy progre Disney ha ganado 7.233 millones de dólares durante los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, un 5% menos que un año antes. El descenso es mayor (-9%) si nos fijamos únicamente en el último trimestre, cuando el beneficio no superó los 2.366 millones. No está siendo un buen ejercicio para la multinacional. El único segmento de actividad que ha crecido durante los nueve primeros meses ha sido el de parques recreativos, con un alza de los ingresos del 9%, hasta los 13.748 millones. Todo lo demás cae. Estudio Disney ingresó un 9% menos y los productos para el consumidor y los medios interactivos, un 15%. Por su parte, los medios de comunicación lograron mantener los ingresos del año anterior pero su resultado operativo fue un 11% inferior y no superó los 5.427 millones de dólares. Con estos resultados sobre la mesa, la compañía ha anunciado que ha roto su acuerdo con Netflix, la primera plataforma de televisión online del mundo. La ruptura se produce un año después de que Disney comprara el 33% de BAMTech -transmisión de vídeos online- por unos 900 millones de euros. El mercado no ha acogido bien ninguna de las dos noticias -resultados y ruptura del acuerdo- y las acciones de la compañía han caído un 4%. A Netflix tampoco le ha sentado bien y sus títulos han retrocedido un 3%. Así las cosas, habrá que esperar hasta principios de 2018 para ver la nueva plataforma que emitirá en directo ESPN, el canal deportivo de la compañía -el que más aporta a su negocio-, que incluye las principales ligas del deporte norteamericano e iberoamericano, así como los torneos de tenis más importantes y el deporte universitario. Y será en 2019 cuando se independice definitivamente de Netflix y emita sus contenidos a través de su propia plataforma en EE.UU. En España se seguirán viendo a través de Netflix. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com