Desde hace años, el gasto público del conjunto de las Administraciones Públicas está disminuyendo en los países de la UE. En 2009, la media europea de gasto público alcanzaba una cifra récord del 50,1% sobre el PIB y ha bajado a un 45,8% en 2017, informa el IEE.
Los países con el mayor gasto público en términos de PIB son Francia con un 56,5%, Finlandia (53,7%), Bélgica (52,2%) y Dinamarca (51,9%). Suecia, Austria e Italia se sitúan en torno al 49%, al tiempo que Grecia, Hungría y Portugal también están entre los estados miembros que superan la media europea.
En Alemania el gasto público ha bajado a un 43,9% sobre el PIB, mientras que Luxemburgo y los Países Bajos están por encima del 42%. En España el gasto público se ha situado en un 41,0% en 2017. Los esfuerzos de contención del gasto público han sido considerables en nuestro país.
Con la crisis económica nuestro nivel de gasto público había alcanzado una cifra récord del 48,1% en 2012. Desde entonces, ha disminuido siete puntos gracias a la disciplina del gasto que debe mantenerse en el futuro.
Por detrás de España figuran nueve países de reciente adhesión, que bajan al entorno del 33% en el caso de Rumania y Lituania. Irlanda cierra la clasificación con un gasto público que llegaba al 47% en 2009 y se ha reducido a un 26,1% en 2017.