Y Barack se quitó la careta

"Aunque le pongan pintalabios a un cerdo, el cerdo no cambia". Líricas palabras de Barack Obama, en respuesta a Sarah Palin, quien dijo, de sí misma, que no de otro, ser lo más parecido a un pitbull con pintalabios. Es decir, que el señor Obama, descendió desde la estratosfera al suelo, al parecer sin paracaídas y, ya de paso, se quitó la careta y se comportó con la finura que le es propia: la de un doberman.

Insisto: Palin se comparó con un perro de presa, ella misma. Trasladado al campo político, la actitud de Sarah frente a la respuesta chulesca a Obama, recuerda aquella idea que distingue a un mártir de un fanático. Se puede morir por unos principios, pero no se puede matar.

El mal no puede soportar la mera visión del bien. Y no digamos nada del bien coherente y valiente. Al final, el hombre de los sueños, el nuevo Luther King, el del cambio, con el que ha dado comienzo el retrasado siglo XXI, el derribador de muros entre blancos y negros, ricos y pobres, creyentes y ateos, Barack Obama, ha utilizado, para denigrar a Sarah Palin, el mismo insulto que los antiguos negreros utilizaban para referirse a los miembros de su raza, de la de su esposa, de las de sus hijos, los negros: cerdos, un denuesto muy referido en la historia del Ku Kux Klan. Los mismos esclavistas que también habrían llamado "cerda" a la madre del candidato Obama por su libérrima y estupenda decisión de unir su vida a la de un negro -perdón-, afroamericano.

Barack Obama creía ganadas las elecciones y controlado a John McCain, y ahora resulta que la aspirante a vicepresidente, que habitualmente nada pinta en las elecciones norteamericanas, le muestra tal cual es.

Otro tanto para Palin, víctima de una campaña de linchamiento mundial. Necesariamente, la gobernadora de Alaska tiene que ser dura para poder sobrevivir a la campaña mundial de linchamiento por atreverse a defender la vida del no nacido y -sacrilegio- atreverse a tener cinco hijos.

Cuando menos, en política hay dos tipos de insulto: los que denuncian un defecto en el programa o en la argumentación del adversario y los que simplemente pretenden hacer daño al enemigo, los que son una mera expresión de odio. Denuncia que el discurso de Obama es un "vacío" pertenece a la primera catalogación; llamarle 'cerda' a Palin corresponde al segundo apartado.

Lo más curioso de las actuales elecciones. El odio rabioso de toda la 'new age', de todo el relativismo, del Nuevo Orden mundial, del Mercado de la Muerte, del lobby feminista, del lobby gay, etc., contra esta mujer hasta anteayer desconocida no tiene parangón hasta allí donde alcanza mi memoria periodística. Los buscadores de basura se han movilizado para intentar vapulear su imagen y apagar su voz. O mucho me equivoco o no lo van a conseguir. Y Obama, si sigue insultando a sus adversarios, a lo mejor deja de tener sueños de hermandad para tener pesadillas de mortandad. De mortandad política, se entiende.

Europa quiere independendizarse de EEUU pero seguir siendo protegida por EEUU

La Fundación BBVA ha elaborado una encuesta sobre la opinión de los europeos en las elecciones norteamericanas. Casi un 70% apuesta por Obama y son amplia mayoría los vecinos del Viejo Continente que desean una mayor independencia diplomática y militar respecto a Estados Unidos.

Lo cual no deja de tener su gracia, dado que Europa lleva cerca de un siglo -desde la I Guerra Mundial- protegida por los Estados Unidos. Hablo de la Europa Occidental, no en sentido geográfico, sino aquélla que cree en unos principios de libertad.

Está muy bien eso de independizarse de Estados Unidos, pero han sido los norteamericanos quienes nos han librado a los europeos, y han pagado vidas por ello, de los nazis, de los comunistas y ahora los que han emprendido la batalla contra los de la II Guerra Mundial, la del terrorismo. ¡OJO!, pienso que George Bush la emprendió fatal, pero la emprendió, mientras Europa continúa cruzada de brazos esperando que USA le saque las castañas del fuego. Las relaciones con Vladimir Putin y su chantaje al mundo libre con el gas constituyen una buena prueba de ello.

Pluralismo Biden

Lo cuenta, cómo no, Noticias Globales: El segundo de Obama, Joe Biden, ha caído en el mismo error de su antecesora, Geraldine Ferraro, católico como él, quien ha descartado estar de acuerdo con la Iglesia en que la vida humana comienza en el momento de la concepción pero que, en una sociedad pluralista, no puede obligar a los no católicos a que no aborten.

La majadería es sublime y en su día ya fue respondida, a su antecesora, Geraldine Ferraro, por el New York Times. Eso es como decir que no se puede obligar a los demás a adoptar la postura de defensa de la vida o como decir que se coincide con la Iglesia en su condena de la esclavitud pero que, naturalmente, en aras del pluralismo de la sociedad norteamericana, no puede obligar a otros a que liberen a sus esclavos.

¿Y este es el aporte de experiencia para Obama? Como se ve, en materia de virtud la experiencia es la madre de la ilusión.

En cualquier caso, los obispos norteamericanos ya se han encargado de responder a la tontuna del amigo Joe.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com