Sr. Director:
Ya otros lo han notado, pero vale la pena repetirlo.

Una ley no es nefasta e injusta porque permite abortar a las adolescentes sin permiso de sus padres, ni es mejor si exige en esos casos el permiso paterno como requisito para que el aborto sea legal.

El aborto es siempre una injusticia y un crimen, tanto si se realiza con permiso de los padres de la adolescente que quiere abortar como si se realiza sin tal permiso.

Vale la pena recordarlo, para no perder de vista lo único importante en este tema: la ley tiene que salvaguardar la vida del hijo y la vocación al amor y a la justicia de su madre.

También si es una madre adolescente, que necesita mucha ayuda de sus padres y de la sociedad para llevar adelante el embarazo y para ofrecer a su hijo la mejor asistencia posible.

Fernando Pascual

fpa@arcol.org