Ahora que el Congreso ha levantado el veto del Senado sin diálogo ninguno y ha aprobado este proyecto antifamiliar, observo con preocupación que aún nadie se han decidido a dar el único paso que todavía puede evitar que esta reforma cause daño a la familia y muy especialmente a los niños huérfanos, que es presentar recurso de inconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional.
En estos momentos, el Grupo Parlamentario que cuente con más de 50 diputados y senadores puede hacerlo. Los ciudadanos ya manifestamos nuestra opinión en las calles el pasado 18 de junio y estamos dispuestos a volver a hacerlo en las próximas elecciones, pero carecemos de poder para presentar este recurso.
Las más doctas instituciones jurídicas españolas (el Consejo de Estado, la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación y el Consejo General del Poder Judicial) han sido unánimes al dictaminar la inconstitucionalidad de la reforma.
Ustedes mismos han elaborado brillantes argumentos en ese sentido durante los debates parlamentarios. Estando clara la inconstitucionalidad de esta Ley y elaborados los argumentos jurídicos, la presentación inmediata del recurso depende sólo de ciertas voluntades, que sean coherentes y presenten inmediatamente un recurso de inconstitucionalidad contra la reforma del Código Civil. En nombre de las familias españolas y de los niños que podrán ser adoptados en los hogares más adecuados para su desarrollo y bienestar, agradezco su atención
M. Lourdes Fernández Miño