- El origen de las protestas es el incumplimiento del compromiso adquirido cuando dejó de ser una ex colonia británica: la celebración de elecciones libres en 2017.
- Los manifestantes -sobre todo, estudiantes- exigen el voto universal y libre.
- Y el Partido Comunista Chino maniobra para los contrario: la elección entre candidatos que se adapten al perfil del gran vecino continental.
- Pekín no quiere otro 'Tiananmen' y evita a toda costa que el 'fenómeno' contagie al resto de los chinos.
¿Y por qué lo hacen Porque el régimen chino no ha cumplido lo que prometió en 1997. Ese año, cuando el Reino Unido devolvió la colonia a China -por cierto, ¿cuándo devolverá Reino Unido Gibraltar a España- los comunistas chinos se comprometieron a que en la colonia hubiese elecciones libres en 2017. Pero no ha sido así: en agosto anunció que sería un comité —controlado por las autoridades comunistas— el que elegiría a los candidatos que la población puede votar. De ahí las protestas de los manifestantes, que exigen el voto universal y libre.
Lo cierto es que a China le ha salido un grano en... Hong Kong. Porque hoy los manifestantes permanecían en las calles, sobre todo en los puntos calientes: es decir, la zona financiera y comercial, la sede del Gobierno local..., pese a las presiones del Gobierno chino para disolver el movimiento.
Según las crónicas periodísticas (diario South China Morning Post,), entre ayer y esta madrugada unas 100.000 personas se han llegado a reunir sin incidentes y en un ambiente festivo. Por la mañana muchos han vuelto a sus hogares y trabajos. Pero es que el lunes se produjeron manifestaciones y paros masivos que incluso afectaron a la industria.
Y este fin de semana -cuando también hubo protestas- la Policía las reprimió, al modo totalitario, es decir, con cargas, gas pimienta y material antidisturbios. Los manifestantes se protegían con paraguas de los gases nocivos.
Permaneceremos atentos a este 'Otoño chino'.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com