El presidente de Telefónica ha realizado una nueva remodelación directiva en la principal compañía española. Como la empresa explica en su comunicado, se consolida el segundo cargo de la compañía en la persona de Julio Linares, Antonio Viana-Baptista y Álvarez Pallete se reparten el negocio. Sólo hay un perdedor que es el histórico, Luis Lada, el hombre más próximo al Partido Socialista, que ha hecho toda su carrera en Telefónica hasta la llegada del PP al poder y de Luis Villalonga a la presidencia.
Precisamente fue Alierta quien recuperó a Lada para la primera línea directiva y le introdujo en el Consejo, lo que ocurre es que Lada no aceptó de buen grado la elevación de Julio Linares hacia un puesto similar en funciones al de consejero delegado aunque con nombre de director general. A estas alturas hasta es posible que Lada tampoco mantenga el puesto de consejero, aunque será vocal en varias entidades filiales y asesor de la presidencia.