La razón está en la caída del turismo y en el desinfle del plan E. El 84% de los parados de agosto son contratados temporales, la mayoría del plan de inversión local, según señala la patronal de las ETTs.
Así que ante un dato tan pavoroso, el Gobierno ha decidido hacer caso a los sindicatos, que reclamaban que la paga de los 420 euros se retrotrayera al 1 de enero. El portavoz del PSOE, José Antonio Alonso, agradece a los sindicatos su sensibilidad social. Muy divertido. Antes de ayer Corbacho tensaba la cuerda afirmando que cada mes de ampliación serían 100 millones de euros adicionales. Pero al final, manda quien manda. Y mandan los sindicatos Lo dejó bien claro Zapatero el pasado viernes: no hay contexto para una reforma laboral porque los sindicatos no la quieren. Más claro, agua.