• Sin embargo, tras sus palabras, la bolsa incrementó su descenso, con especial incidencia en el sector bancario.
  • Ha mencionado hasta tres veces la irreversibilidad del euro.
  • Y la prima de riesgo sigue en niveles récord.
  • El presidente aclara que la causa no es el sanemiento de Bankia.
  • Y también insiste en que Bruselas tiene que aliviar la presión sobre la deuda en España.
  • En otras palabras, que compre nuestro bono.
  • Sólo se fía de los consejos de Arriola y Arenas, quienes le aconsejan que hable lo menos posible.
  • No va a dejar quebrar ningún banco ni ninguna comunidad autónoma.

Ya era hora. El hombre silente que siempre elude hablar tras las Ejecutivas del Partido, por fín ha hablado. En el último Consejo de Ministros le reprocharon a Soraya Sáenz de Santamaría las escasas apariciones públicas del presidente, y en el mundo de la banca todos se preguntaban cuándo iba por fin a dar la cara. Con la prima desatada, por encima de 500 puntos -hasta 514 ha subido en la mañana del lunes-,  las acciones de Bankia por los suelos y los 23 mil millones que precisa la entidad nacionalizada para reflotarse, no había otro remedio que salir al ruedo y salirse de las normas de  comportamiento estipuladas por Arriola y Arenas, sus gurús en comunicación: "Mariano, habla lo menos posible".
El presidente de Gobierno ha hablado este lunes en rueda de prensa y ha señalado que no cree "que en la evolución de la prima de riesgo haya influido absolutamente para nada la decisión que hemos tomado con Bankia".
Rajoy ha defendido la transparencia con la cual se ha llevado a cabo el proceso y ha declarado que el objetivo del Gobierno es "garantizar los depósitos, sanear la entidad y recuperar la confianza de los inversores". La decisión sobre Bankia "se adopta en un contexto de recapitalización del sector". La meta es, afirma, "que vuelva el crédito… sacar las viviendas a la venta y venderlas por el precio auténtico de mercado". Sobre el posible análisis  y consecuente depuracion de responsabilidades de los gestores de Bankia, Rajoy se ha enrocado en otras nacionalizaciones, por supuesto realizadas por el PSOE. Y de este discurso no había quien le apeara: "No es la primera vez que se toma una decisión así. Sólo hay que recordar que Caja Castilla la Mancha, Caixacataluña, Cajasur, y Novacaixa Galicia también fueron nacionalizadas… Se ha creado una subcomisión dentro de la comisión de Economía para analizarlo todo".
Rajoy ha señalado que no va a dejar quebrar ningún banco, como tampoco a ninguna comunidad autónoma, en alusión a las peticiones de auxilio de Cataluña.
El presidente de Gobierno (en la imagen, durante la reunión de la Ejecutiva junto a Cospedal y Javier Arenas)  recalcó varias veces, tal vez demasiadas, que no hay vuelta atrás en la senda del euro, ha mencionado hasta en tres ocasiones su lema:  la irreversibilidad del euro.
También negó que España necesite del rescate por parte de Europa. No obstante dejó caer que tanto nuestro país como otros de Europa agradecerían un alivio de la presión por parte del Banco Central Europeo.
El Estado, ha señalado, tiene que hacer lo que está haciendo, "corregir el déficit, garantizar la sostenibilidad de las rentas públicas… aunque nuestro déficit del sector exterior sea del 1%, tenemos que pagar lo que tenemos de atrás. Antes nos refinanciaban, ahora hay dudas sobre el proceso en el que estamos metidos... Quiero mandar un mensaje nítido, claro, el euro es irreversible" .
Tanta irreversibilidad no ha tranquilizado a los mercados. Al término de la intervención de Mariano Rajoy, al medio día la bolsa seguía bajando, especialmente en el sector bancario, y la prima de riesgo oscilaba en torno a los 508 puntos.

Sara Olivo
sara@hispanidad.com