Están surgiendo noticias sobre la fuga de empresas de Cataluña hacia el resto de España.
No me extraña. Conozco personalmente dos casos: una pyme catalana del sector médico que se ha trasladado a Madrid y otra de pinturas que se ha ido a Aragón. El dinero huye de los riesgos, tanto económicos como políticos.
Si usted fuera un empresario alemán, ¿crearía su filial en España en un sitio donde sus gobernantes amenazan continuamente con irse de España Y por no hablar del riesgo de salir de la Unión Europea, con aranceles y dificultades adicionales de muchos tipos.
Los datos son tozudos: hace unos años se creaban el mismo número de empresas en Madrid que en Cataluña; el año pasado ya se crearon el triple de sociedades anónimas en Madrid que en las cuatro provincias catalanas juntas.
A buen entendedor, pocas palabras faltan. Artur Mas debería darse cuenta que generar incertidumbres e inseguridad jurídica no sale gratis y nos acaba perjudicando en primer lugar a los catalanes.
María José Raga Salou