Sr. Director:
Ser católico no está de moda. No, ahora lo que "se lleva" es ser anticatólico y profesar una animadversión contra todo lo que tiene que ver con el catolicismo, es decir fomentar el anticlericalismo porque es muy "chic" en estos momentos.
Ya no nos basta con el laicismo, que desde un punto de vista puramente conceptual, tiene su cabida en el término "Estado" como una realidad social que debe dar respuesta a un hecho puramente objetivo de las relaciones con el ciudadano. Ahora, además es necesario poner en ridículo y satirizar, poner en duda, criticar y polemizar sobre todo aquello que tenga que ver con el catolicismo; por supuesto, las demás religiones son sagradas y hay que respetarlas aunque no se comulgue con ellas, pero al católico...ni agua.
En fin, que lo que se lleva ahora, es la mala educación y el mal gusto; el resentimiento y la proclamación pública del ensañamiento hacia lo religioso, cuando en privado, seguro que se encomiendan a más de un santo. Hipocresía socialista a la que ya estamos acostumbrados.
Javier Gausí Sánchez-Rubio
javiergausi@yahoo.es