El 57% de los españoles prefiere ser empresario a trabajar por cuenta ajena. Un porcentaje que casi roza el norteamericano (60%) es decir, el del país que más apuesta por el autoempleo. Sin embargo, sólo el 37% de los europeos prefieren poner su propio negocio mientras que el resto opta por la tranquilidad de la nómina. Esta es la principal consecuencia de la encuesta realizada por la Comisión Europea sobre una muestra de 12.539 personas, y recogida por las cámaras de comercio. Y una curiosidad: los emprendedores y europeos tienen miedo a la quiebra a la hora de poner un negocio. Sin embargo, los norteamericanos lo que temen es la incertidumbre en los ingresos.

 

En cualquier caso, estos porcentajes no son ajenos a la filosofía y estilos de vida propios de dos modelos tan distintos como el europeo y el norteamericano. Eso sí: llama la atención la tendencia de ambos hemisferios a homologarse, porque la encuesta también retrata a un gigante norteamericano que también busca la seguridad de la nómina. Al menos, los aspirantes asalariados han crecido durante la última década mientras descendía el número de emprendedores.