Entra un tipo en una juguetería y le pregunta al dependiente:
-¿Cuánto cuesta la Barbie?
-Depende: ¿qué Barbie?
-Por ejemplo, esa de ahí.
-Esa es la Barbie ejecutiva con su cartera, su mesa de despacho... 75 euros.
-¿Y esa otra?
-Es la Barbie enfermera, delantal, cofia... 75 euros.
-¿Y esa?
-La Barbie bailarina, con su tutú y demás aditamentos: 75 euros.
-¿Y esa que no tiene nada?
-¡Ah!, esa es la Barbie divorciada: 150 euros.
-Y por qué cuesta el doble si no tiene nada.
-¿Que no? Tiene el piso de Ken, el apartamento de Ken, el coche de Ken...
Preocupado con la economía, Mariano Rajoy no ha tenido tiempo para preocuparse de una de las tontunas más peligrosas y nocivas de Zapatero: el divorcio exprés, promulgada al mismo tiempo que el gaymonio - u homomonio- y tan peligroso o más que éste. A lo mejor es el momento de que el ministro Gallardón se invente una teoría al efecto.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com