La Comisión se mostró satisfecha tras el tercer plan de austeridad presentado por Grecia. El ajuste es muy severo y La Comisión se da por satisfecha. Pero Alemania no. No quiere ser la pagana de la fiesta. Y sobre todo, su opinión pública no se lo toleraría. Así que Merkel trata de hacerse la remolona mientras que Barroso trata de meter presión. Y en estas, llega Moratinos para aventurar que el asunto se cerrará esta misma semana. Y por supuesto, España será de los países que participen en la solución. O sea, que extenderemos la chequera. ¡Será por dinero!