El servicio de noticias del vaticano ha recogido las declaraciones del portavoz de la Santa Sede, el Padre Federico Lombardi, ante la campaña publicitaria de Benetton, consistente en un montaje fotográfico en Roma que muestra al Papa Benedicto XVI besándose con el imán de la mezquita de Al-Azhar en El Cairo. Según el padre Lombardi, "es inaceptable. Es una gran falta de respeto. Ofende los sentimientos de los fieles".
Proseguía Lombardi: "Es necesario expresar una protesta decisiva por un uso inaceptable de la imagen del Santo Padre, manipulada e instrumentalizada en la foto de una campaña publicitaria de una gran casa de moda italiana con finalidad comercial". Y añadió: "Es una gran falta de respeto para el Papa, ofende los sentimientos de los fieles, es una demostración evidente de cómo en el ámbito de la publicidad se puedan violar las leyes elementales del respeto de las personas para llamar la atención por medio de la provocación". Al respecto el Padre Lombardi dijo que la Secretaría de Estado está considerando los pasos por seguir ante las autoridades de competencia para garantizar una justa tutela del respeto de la figura del Santo Padre.
Benetton ya ha retirado la campaña aunque su excusa fue que "el objetivo de la campaña (Unhate) es combatir la cultura del odio en todas sus formas". La campaña publicitaria incluye otros besos igualmente falsos entre Barack Obama y Hugo Chávez, Angela Merkel y Nicolas Sarkozy, entre otros, a los que, imaginamos, no habrá hecho ninguna gracia que utilicen su imagen con fines publicitarios.
Proponemos una idea a Benetton: en la próxima campaña publicitaria, que aparezcan los padres del empresario Luciano Benetton dándose un morreo, foto que, por supuesto, aparecerá en carteles por todo el mundo. A lo mejor entonces -por aquello de la empatía, o sea, ponerse en el lugar de otro- entiende lo que es el respeto o se lo hacen entender sus padres.
José Ángel Gutiérrez
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