Niega intervensionismo gubernamental y reitera su "respeto" al mercado
Blanco niega cualquier tipo de intervensionismo gubernamental en el culebrón sobre Endesa y señala con ironía que la oposición le adjudica intervención en todos los pasos desde hace un año. Lo malo es que la oposición tiene razón. El gobierno tripartito catalán amparó, bendijo y miró con buenos ojos la ‘OPA a la catalana' lanzada por Gas Natural. Posteriormente, fue el gobierno el que por real decreto amplió las competencias de la CNE para meter palos en las ruedas a E.ON. La cosa no funcionó y fue Moncloa quien preparó la entrada de los Entrecanales en la eléctrica. Y finalmente, ha sido el gobierno quien ha propiciado la irrupción de ENEL en el Falcon Crest de Endesa.
Por eso resulta insultante que Blanco afirmara en la mañana de este miércoles que cuando Clos hablaba de las posibilidades de la "opción española" lo hacía por "intuición". Según Blanco, "desde luego, información no tenía". La parroquia se ha molestado porque no conviene insultar a la inteligencia más allá de lo estrictamente indispensable.
No obstante, Blanco insiste en el "respeto al mercado", aunque añade que "a mi siempre me gustó una solución en clave española". El secretario general del PSOE dice que afirma esto como "opinión personal". Carcajada entre el público, porque un secretario general de un partido en el gobierno, obviamente, no tiene opinión personal. Ha ganado el "patriotismo empresarial" de Zapatero., Ya veremos cuáles son las consecuencias.