Los tiempos han cambiado; ya nada será como antes. La sentencia es de José Blanco, que ha pasado de anunciar el AVE Segovia-Ávila a anunciar recortes en líneas férreas tradicionales como Madrid-Burgos. Y entre esos cambios, anuncia en la mañana de este jueves una revisión de la planificación de autovías que estén pegadas a autopistas no saturadas. Se acabó. Nunca mais. Para los licenciatarios es una buena noticia. Para los conductores, una mala. Pero no hay más remedio. No se pueden duplicar las infraestructuras. La experiencia además de las radiales de Madrid es que son una ruina: la alternativa gratuita es tan buena o mejor que la de peaje.
Curioso que el anuncio de Blanco coincida con lo adelantado hace una semana por la patronal CEOE. Estamos dispuestos a hacer cosas aunque no nos convengan políticamente, señala. Incluso añade que no se trata de una cuestión temporal por la necesidad de la sostenibilidad de las cuentas públicas, sino que el frenazo obedece a un cambio de ciclo. Y sobre todo a que ya hemos construido casi todo lo que teníamos que construir. ¿Asfaltamos las islas Canarias?, se preguntaba con humor Pedro Solbes.