En Onda Cero, José María Calleja opinaba que parece evidente que la reunión del viernes tenía que hacerse. Mucha gente la veníamos reclamando desde hace tiempo. El hecho de que se produzca la reunión no es ninguna claudicación por parte de Rajoy. Es una reunión decisiva. Ojalá se rompa el clima de enfrentamiento y ojalá de esta reunión salga un clima de entendimiento. Y añadía: (la reunión) es en gran medida para explicar la información que se ha podido sacar de ETA el pasado jueves. Desde el primer momento ha habido un tono catastrofista, hemos oído que se ha traicionado a  los muertos, que se ha entregado Navarra. Nada de eso se ha producido. La jornada de supuesta lucha convocada y que ha sido prohibida va a demostrar la pérdida de fuelle movilizador por parte de esta gente.