• Lo malo es que el saneamiento de CX va con mucho retraso.
  • Tanto es así que NCG Banco tiene muchos postores y CX es un quebradero de cabeza para el FROB.
  • Aunque todo dependerá de las ayudas del Gobierno.
  • No obstante, la Generalitat sigue empeñada en mantener la catalanidad de la entidad.

El Expediente de Regulación de Empleo de Cataluña Banc (CX) podría afectar a unos 3.000 trabajadores, según el mandato de Bruselas. Las negociaciones, en cualquier caso, entre la dirección y los trabajadores han comenzado este martes, lo que da una idea del retraso que acumula el saneamiento de la entidad.

Esto es precisamente lo que se le ha criticado al expresidente del banco, Adolf Todó: su pasmosa lentitud para sanear la entidad. Ahora, con José Carlos Pla (en la imagen) al frente, la situación es peor y la urgencia, mayor.

Efectivamente, a estas alturas el reloj no juega a favor del proceso de reestructuración de la entidad. Y si no miren la diferencia con NCG Banco. La entidad gallega que preside José María Castellano tiene muchos postores mientras que CX es un auténtico quebradero de cabeza para el FROB y para el ministro de Economía, Luis de Guindos que, después de dos fracasos no puede permitirse un tercero.

Todo dependerá de las ayudas del Gobierno. De momento, el FROB promete ayudas por 6.000 millones de euros, lo que convertiría a CX en la entidad cuyo reflotamiento habría salido más caro a los españoles, conforme a su tamaño: un total de 18.000 millones de euros.

Aún así, las entidades interesadas -Santander y Popular, sobre todo- exigen más ayudas al Ejecutivo. Son conscientes del deterioro que acumula y de que nadie quiere quedarse con él.

Y mientras, la Generalitat continúa empeñada en que la entidad conserve su catalanidad, esto es, su sede social en Barcelona. Ya veremos. De momento, los trabajadores y la dirección negocian el ERE con retraso.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com