Sr. Director:

 

El Gobierno andaluz del socialista Manuel Chaves hace una nueva y patente discriminación en los impresos de matriculación de alumnos, al no figurar la elección a clases de religión católica o su asignatura alternativa.

 

La Consejería de Educación, con su radicalismo laicista, pretende imponer que no existan clases de religión, sin dar explicaciones ni en colegios ni en las hojas de matriculación sobre el derecho que nos asiste a los padres. Ésta actitud hostil y manipuladora de la Junta, regida por el PSOE, es un auténtico desprecio hacia los ciudadanos y sus derechos.

 

Ana Aguilar

 

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