Muchos aún tenemos grabada en la memoria la imagen de aquel guardia civil con la cara ensangrentada sacando a una niña en brazos entre los escombros.
Fue en Vic hace justo 20 años en uno de los atentados más sangrientos de ETA, con 44 heridos y 10 muertos, cinco de ellos niños. En el aniversario se ha hecho un acto con 300 ciudadanos de Vic, partidos políticos, asociaciones y con la incomprensible ausencia de CiU y de su alcalde en Vic.
¿Si las víctimas hubieran sido mossos en vez de guardia civiles tampoco hubieran ido los nacionalistas? Me parece lamentable la actitud de CiU. No sé si ganarán cuatro votos de independentistas dando la espalda a la Guardia Civil, pero han demostrado muy poca sensibilidad con las víctimas y muy poca ética.
Carmen M. Maciá