CIU propone que baje el gas, la luz, el IVA y el Impuesto de Sociedades

En TVE, Josep Antoni Durán i Lleida, de CIU, se refería a la crisis económica y explicaba la filosofía de fondo de las medidas económicas propuestas por CIU en el debate de septiembre: "hay que sustituir el modelo de crecimiento español. Esas medidas van encaminadas a lograr unas garantías de cambio del modelo de crecimiento. La construcción debe ser sustituida por la industria, que debe apoyarse en la innovación y el desarrollo. Nuestras enmiendas procuran liquidez al sistema en estos momentos", y otras medidas "sobre reformas estructurales como pudiera ser el mercado laboral, y medidas fiscales, como la rebaja del impuesto de Sociedades".

Respecto a si CIU aprobará el presupuesto de 2009, Durán señalaba: "primero, hay que conocer a fondo el presupuesto, segundo, nosotros deseamos aprobarlo, siempre y cuando contenga las medidas para poder enfocar la crisis de acuerdo con lo que ha establecido CIU en sus intervenciones". "Una medida que a nosotros nos parece muy importante, para que pueda ayudar a la propia capacidad adquisitiva de las familias y pueda corregir algo la inflación, es la bajada del IVA, del gas y la electricidad. Lo propuso así CIU la semana pasada, y no lo votó el PSOE. Consecuentemente, estamos a la expectativa de cuál va a ser la actitud del Gobierno. Si el Gobierno está dispuesto a asegurar que en las pensiones se incremente la base reguladora, es un dato positivo; si el Gobierno está dispuesto a bajar el tipo de sociedades, especialmente a la PYME, es un dato positivo; si está dispuesto, a crear empresas de colocación privadas dentro del sector público de colocación, es un dato positivo. Y en ese contexto, entra también la financiación de las comunidades autónomas, porque es fundamental", "porque quien corre hoy a cargo del gasto social son las comunidades autónomas". Añadía Durán: "los presupuestos, de por sí no son un instrumento de lucha por la crisis, es cierto que hay crisis, pero siempre y cuando los presupuestos sean adecuados a esa crisis. Entonces sí que responsablemente se nos puede apelar al voto positivo, pero si no, no".

Le preguntaba Pepa Bueno a Durán, utilizando la terminología socialista, por el suicidio asistido. Durán le llamaba por su nombre: "yo no soy partidario de la eutanasia activa, pero en Cataluña tenemos regulado lo que es el testamento vital. Por lo tanto, dejar constancia de cuál es la voluntad del enfermo de cara a cuál pueda ser su futuro. Habrá que ver cómo detalla el Gobierno sus intenciones en su proyecto de ley y ver hasta qué punto coincide o no con el testamento vital que está legislad en Cataluña o va mucho más allá. Si va más allá, yo no estaré de acuerdo".

Respecto al nombramiento del juez Carlos Dívar como presidente del CGPJ, Durán comentaba: "a mí me parece innecesario que se subraye si alguien es o no religioso. Pero yo no lo veo con ojos distintos que pueda verlo un liberal, socialdemócrata conservador, la designación de alguien muy religioso. Yo respeto la vida privada de cada uno y a mí lo que me interesa es si va ser un buen presiden del CGPJ y del Tribunal Supremo".

También en Intereconomía, Josep Sánchez Llibre, diputado de CIU, opinaba sobre el plan de rescate del Gobierno de EEUU aportando 700 mil millones de dólares para comprar activos tóxicos: "el congreso de EEUU cometería un gran error si no aprobara este plan de ayuda porque su no aprobación repercutiría negativamente en toda la economía mundial". "Hay que plantear una problemática que tiene el tejido industrial español. Aquí se habla de que se inyecta mucho dinero desde el BCE a las diferentes economías pero la triste realidad es que el pequeño negocio, la empresa industrial que no está en el negocio inmobiliario, el que tiene el plan de negocio saneado, tiene grandes dificultades para acudir a la financiación. Ni le renuevan los créditos que tiene ni puede abordar nuevos negocios. ¿Cómo se resuelve esta situación?".

El tertuliano Carlos Rodríguez Brown, opinaba en la misma emisora que "el plan de Bush, a lo mejor, en lugar de resolver la crisis lo que hace es extenderla en el tiempo. Esto a lo mejor se puede hacer, porque ya se hizo. El Plan de Roosevelt, el New Deal, lo que logró fue extender la crisis a lo largo de toda la década de los años 30. Por eso se llamó a Gran Depresión, que fue mucho más larga en EEUU que en otros países".

En Intereconomía, Eduardo Aguilar, de BNP Paribas, comentaba la inyección de dinero en los mercados financieros que están acometiendo algunos bancos centrales: "es la operación más importante financieramente en la historia de la economía mundial. Es una operación necesaria. Tampoco entiendo bien por qué desde algunos ámbitos se ha intentado criticarla, al fin y al cabo es una garantía hacia el mercado para equilibrarlo. Luego habrá que ver si el fruto es el adecuado o crea alguna divergencia". Más tarde añadía: "España tiene un sistema financiero fantástico, muy atomizado donde las entidades financieras y las cajas llegan a todas partes. Luego tiene un tejido industrial de mucha PYME que necesita esa financiación. Y el problema es que todo está vinculado. España está en situación de déficit, necesita de los mercados financieros, todas las entidades financieras españolas necesitan el recurso al exterior, igual que la economía general, y esta crisis general de liquidez y de instituciones financieras que está matando mercados repercute macro económicamente en esas entidades. Y al no poder tener otros recursos que el acceso al banco central y a esa liquidez lo primero que hacen las entidades financieras es encogerse y empezar a cortar líneas porque no tienen fondos para prestar. Y quien más sufre las consecuencias es la pequeña entidad o el particular que quiere acceder a esa financiación".

En Onda Cero, el tertuliano José Mari Calleja señalaba que "el papá Estado (de EEUU) ha tenido que socorrer con el equivalente al PIB de España a unos bancos que han hecho las cosas mal". "Lo que tenemos hasta ahora es que una determinada forma de entender el capitalismo, -aquí el jefe de los empresarios en España ha pedido un tiempo muerto en la economía de mercado- alguien tendría que reconocer que una determinada forma de hacer las cosas, esa avaricia desbocada, ha provocado un catacrack en el país más rico y poderoso del mundo".

En la SER, el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, se refería al plan de modernización de la justicia: "esas medidas de modernización van a conseguir que articulemos un sistema de interconexión de juzgados que estará listo en el primer trimestre del próximo año". "El paquete legislativo que accederá al Parlamento permitirá la modernización de las pautas de trabajo, del reparto de roles entre los distintos funcionarios que trabajan en los juzgados, jueces que se dediquen sólo a juzgar, funcionarios del cuerpo superior de secretarios que se dediquen a dirigir el procedimiento y a dirigir técnicamente la oficina y un modelo mucho más flexible de funcionamiento con unos roles de trabajo perfectamente protocolizados que una vez ordenados permitirán una aplicación informática global que significará la introducción de la tecnología punta en la administración de justicia".

En lo que respecta al nombramiento del juez Carlos Dívar como presidente del CGPJ a propuesta del presidente del Gobierno, Carles Francino le sacaba al ministro de Justicia sus convicciones religiosas, como si fueran un obstáculo para su nombramiento. ¿Qué pasa, Carles, que tiene que tiene que tener el carnet de laicista y de ateo para poder gobernar esa institución? No hay que tener en cuenta las convicciones religiosas a la hora de presidir un cargo público, porque también un creyente tiene derecho a presidirlo, si es un buen profesional. Luego, él sabrá si es coherente o no con sus convicciones allá donde esté. Le preguntaba Francino así: "no sé si sabe usted que escribe en una publicación de la hermandad del Valle de los Caídos y eso nos llamaba la atención. Uno se pregunta, a la hora de dilucidar cuestiones que van a estar sobre la mesa, el aborto, la eutanasia, etc., si un juez, por muy convencido que esté de su imparcialidad, puede mantener esos principios al margen de sus decisiones...". Aunque en el fondo, Francino tiene razón, porque lo que le está preguntando al ministro es: ‘ojo, no vaya a ser que Dívar sea coherente con sus convicciones'...

Y Bermejo respondía esto, que tampoco tiene desperdicio, porque aboga por la esquizofrenia en la vida de las personas, o sea, por un lado sus creencias y por otro, su trabajo, ambos separados: "Carlos Dívar tiene una larguísima trayectoria como juez y como juez ha sido un hombre que ha destacado por su prudencia, virtud esencial en esa función, por su discreción, virtud no menos esencial, por su ejercicio de neutralidad permanente. Creo que es un ejemplo para todos los jueces en el ejercicio de dejar fuera del despacho las convicciones personales. Ha hecho gala de ello. Me gustaría que cuando se le enjuicie se haga lo mismo que con todos. A mí no me importa reconocer mi laicidad pero creo que no se me debe computar a la hora de mi ejercicio profesional o político. Creo que con Carlos Dívar hay que hacer lo mismo". "Es una opción intachable e introduce un factor de neutralidad que va a venir muy bien ese consejo". Ahora, la pelota está en el tejado de Carlos Dívar, si es elegido presidente del CGPJ. ¿Será coherente con sus convicciones en su vida profesional? Allá cada uno con su conciencia.