El discurso de Durán i Lleida es recurrente: no se trata sólo de ajustar los gastos, sino de apoyar el crecimiento económico, la competitividad y la creación de empleo. Por eso, además de las reformas estructurales necesarias, reclama dos medidas urgentes que ayudarían a estos fines: la bonificación en la Seguridad Social del 100% para los nuevos empleos creados y la deducción del 100% de los beneficios reinvertidos.
Zapatero responde que la reforma del sistema financiero está muy avanzada y rechaza las bonificaciones a la Seguridad Social por el escaso éxito que están teniendo las actuales bonificaciones. Las medidas que necesitamos son más de fondo, concluye.