Hay un detalle que se está ocultando a la opinión pública sobre el caso FCC, la segunda empresa española, que se disputan Esther Koplowitz, su principal accionista, y su competidora Acciona, de la familia Entrecanales. LA clave está, como se sabe, en la venta del paquete del 49% de la sociedad B-1998, a su vez propietaria del 52% de FCC. Este 49% obra en poder de los franceses de Veolia-Vivendi, que quieren vender a los Entrecanales, es decir, que están dispuestos a traicionar a Koplowitz.

 

Pues bien, lo que se ignora es que el acuerdo entre Esther y los franceses venció hace casi un año, y que en aquel momento Esther podía haber comprado el paquete a 22 euros por acción, cuando ahora roza los 30 euros en bolsa (cantidad que los Entrecanales, naturalmente, están deseosos de abonar). En aquel momento, Koplowitz no quiso jugarles una mala pasada a sus socios franceses… que así se lo están pagando ahora.

 

Por cierto, una de las personas que aconsejó a Koplowitz que diera un respiro a los galos fue su actual marido, Fernando Falcó, Marqués de Cubas, un monstruo de las finanzas.