Sr. Director:

Es bien conocido cómo en el Imperio Romano el ciudadano tenía unos derechos que debían ser respetados. Pablo de Tarso, conocedor de sus derechos como ciudadano romano, cuando es acusado por los judíos y va a ser azotado por los soldados, les dice: "Apelo al César". Y de inmediato, es llevado a Roma para que sea escuchada su causa y respetados sus derechos. Ya esta bien.

Pues yo, como granadino, apelo a Rodríguez Zapatero, y a mi derecho a ser recibido en el Palacio de La Moncloa para hablar de mi Ciudad Estado Granada, como el señor Maragall. Volvemos a los reinos de Taifas. Dentro del marco de la Constitución, -a diferencia del Estado "asociado" del señor Ibarreche, o del Estado "enchufado" del catalán ultra-, a mí lo que me gusta es que se modifique el Estatuto de Andalucía otorgando a Granada su reconocimiento como "Reino", -que ya lo fue a diferencia de Catalunya que no lo fue-. Eso sí, un reino "vasallo" del Reino de España, pero con todos los derechos y prerrogativas que tenía. Además, cuento con el apoyo ideológico de un barón del PSOE: Rodríguez Ibarra. Ah, y que se someta a referéndum de todos los españoles.

Qué tontería más grande acabo de escribir. Pues, así está España en septiembre.

Enrique Palacios

epalaci@supercable.es