El ministro de trabajo dice que será "el más feliz del mundo" si ninguno de los 87.000 inmigrantes opta por el retorno voluntario
José Corbacho, ministro de Trabajo, se refirió este martes al decreto aprobado en el último Consejo de Ministros para detallar el Plan de Retorno Voluntario. Corbacho señaló que no se trata de un plan de coyuntura, sino de una medida permanente. Pero se resiste a dar cifras: "Se acogerán todos aquellos que deseen acogerse", aseveró Corbacho, amante de las tautologías. Además, el ministro no quiere que se valore su éxito según el número de inmigrantes que se ha acogido. Lo cierto es que el Gobierno espera que una tercera parte retorne a su país de origen.
Es más, Corbacho plantea el análisis en términos de gana-gana cuando advierte que será "el más feliz del mundo" si ninguno de los 87.000 inmigrantes con derecho a acogerse al plan opta por volver a su país. Para el responsable de la cartera de Trabajo, eso significaría que en España hay más futuro que en su país. Genial. Corbacho no parece confiar demasiado en la medida, se queda con la idea de que estamos mejor que los que están muy mal. Siempre positivo, prefiere seguir la máxima filosófica de ZP: con pesimismo no se arregla nada.