México, qué país tan hermoso pero qué pena la clase política y dirigente que tienen.
Estuve viajando por aquellas tierras durante 2 años, prácticamente todos los meses del año, unas 14 veces al año y no me sorprendió ver la elefantiásica corrupción del poder político, la enorme desigualdad social y la tremenda inseguridad que allá se vive.
Pienso que es la herencia española, caciquil, de cortijo; algo así como lo que por aquí también llevamos viviendo desde siempre. Una pena. ¿Para cuándo sistemas de control a los políticos, impresentables y demás personajes del poder?
Jose Bernar
j_bernar@hotmail.com