Cientos de padres han solicitado en Cataluña una educación bilingüe para que sus hijos tengan unas asignaturas en castellano y otras en catalán.
Me uno a ellos desde ya. Me pregunto por qué nuestras dos lenguas oficiales no pueden convivir en la escuela con la misma normalidad que conviven en la calle. ¿Por qué motivo nuestros hijos no pueden tener matemáticas en castellano y ciencias sociales en catalán, por ejemplo? ¿Por qué esta obsesión por arrinconar y excluir de nuestros colegios la lengua que hablamos la mitad de los ciudadanos?
Un sistema educativo que de verdad cohesiona la sociedad es aquel que usa y respeta las dos lenguas que utilizan sus ciudadanos, no el que expulsa a una de ellas.
Miguel Torres