Que el dinero no hace la felicidad es algo que la sabiduría popular había descubierto hace mucho tiempo, recuerdo que siendo aún muy niño ya se lo oía a mi abuelo, agricultor castellano viejo.
Pero ahora lo ha venido a demostrar un llamativo sondeo realizado en 24 países por el prestigioso instituto IPSOS.
Según esta encuesta el número de personas que se consideran "felices" o "muy felices" ha aumentado de manera significativa a partir del año en que el mundo entró en crisis económica. En España e Italia, que antes de la crisis eran considerados países ricos, el hecho de haber entrado en recesión económica ha elevado el número de "infelices" o tristes y tan solo un 11% de los españoles se declara "feliz", menos de la mitad del promedio. Como contraste, el índice de "felicidad" se concentra en los países de economías pobres o de ingresos medios, es decir, entre aquellos que ya están habituados a vivir en la austeridad como es el caso de India, Indonesia o México.
Cuando he leído los resultados del sondeo no he podido por menos que exclamar: ¡Cuanta razón tenía mi abuelo!
Domingo Martínez Madrid