Por desgracia, los datos de la DGT sobre víctimas en carretera durante los últimos meses confirman la tendencia negativa de los últimos tiempos.
Parece que se agota el efecto del carné por puntos y otras medidas legislativas, tampoco las dos primeras semanas de reducción de la velocidad (110 Km./hora) se han reducido, tal vez porque la sociedad percibe un exceso de afán recaudatorio en las sanciones de tráfico.
Es importante recuperar cuanto antes el buen camino para reducir los efectos de este drama personal y familiar. Al margen de multas y campañas de imagen, aunque ahora no vemos aparecer en los medios de comunicación social al Sr. Pere Navarro como cuando las cosas iban bien, la administración tiene muchos deberes pendientes; entre ellos, mejorar el estado de conservación de la red secundaria y reforzar la educación vial, lástima que sea prioritario el recaudatorio o al menos así lo parece.
Jaume Catalán Díaz