Sr. Director:
Sé que las comparaciones son odiosas, pero viendo ayer, la tele he presenciado mensajes televisivos a sus naciones de George Bush, Lula da Silva, Toni Blair, Chirac, Ciampi (Presidente de Italia), y otros presidentes de países iberoamericanos e incluso de países musulmanes. En vano esperé ver a nuestro presidente Zapatero.
En casi todos estos países se han decretado tres días de luto oficial, incluido Egipto, país confesionalmente musulmán. En Brasil, gobernado por un socialista el luto durará una semana y en su Polonia natal el Papa será objeto de luto hasta el día de su entierro. El luto en España será de un sólo día.
¿Que ocurre en España para que sea ignorado este sentir no ya popular sino mundial? ¿Es en base a ese laicismo tan pregonado por nuestro Gobierno? Porque si es por eso, la oficialmente laica Francia no ha dudado en reconocer la figura de Juan Pablo. Qué decir de esos países no cristianos.
Repito, las comparaciones son odiosas, pero, ¿no es hora de plantearnos porque tener miedo a manifestar lo que casi todos sentimos? Yo por mi parte ya no dudaré en declararme católico allá donde sea. Me siento orgulloso de seguir los pasos de Juan Pablo II.
Pedro Díaz Gómez
diazgomez6@hotmail.com