El PNV avisa al Gobierno que sin Bildu en las elecciones del 22-M, no apoyará los presupuestos de 2012.
El Tribunal Supremo está analizando los escritos presentados por la Abogacía y la Fiscalía del Estado para impedir la presencia de las listas de Bildu en las elecciones del 22-M y para dar otra vuelta de tuerca, dos nuevos chantajes aprietan la soga al Gobierno.
Por un lado, y de manera sorpresiva, ETA ha enviado a los presidentes de la patronal vasca y navarra de empresarios una carta en la que anuncia el fin de la extorsión. Es curioso que se pueda recibir con alborozo esta noticia, cuando lo que haríamos sería aplaudir que dejen de cometer un delito. Lo que habría que hacer es perseguirlo de manera que ETA no pudiera chantajear. Los empresarios ven la información con escepticismo. Lo que está claro es que si Bildu llega a colarse en los ayuntamientos, ETA ya no necesitará otra gallina de los huevos de oro. La tendrá en las alcaldías.
Pero por otro lado, ha aparecido la mano del hermano bueno del nacionalismo. El PNV también ha lanzado su órdago al Gobierno. Si Bildu no puede presentarse el 22-M, el PNV amenaza con negar su apoyo al Ejecutivo para los presupuestos de 2012, pero también para cualquier otra ley que se tenga que aprobar en el Parlamento. Si esto fuera así, al Ejecutivo no le quedaría otra salida que adelantar las elecciones pues con la situación actual, gobernar en minoría podría suponer un cáncer para el país.
Lo que está claro es que el apoyo que ETA está ofreciendo a Bildu con estos pasos que quedan muy bien para la galería, es una muestra de que ambas marcas son lo mismo. La última palabra está en boca del Tribunal Supremo.
Juan María Piñero
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