Sí, lo han leído bien. Según el estudio La infancia en Cifras de los 7,6 millones de menores existentes en España, dos millones se encuentran frente a la tele a las 12 de la noche. El dato es preocupante porque apunta al creciente consumo televisivo por parte de los menores españoles. La tele se ha convertido en el gran educador y en ocasiones en el chupete electrónico.
Si además tenemos en cuenta que los contenidos televisivos nocturnos no son aptos para menores, no cabe sorprenderse después de la violencia en las aulas, de la ausencia de valores, etc. Este domingo pudo observarse en Operación Triunfo una muestra de la indisciplina propia de las aulas. Los profesores de la academia se mostraron indignados por la falta de criterio por parte de los participantes del concurso televisivo para quienes no existen otras normas que su propia voluntad.
Los responsables de OT se mostraron muy preocupados. Es la primera vez que ocurre esto en la Academia, señalaba indignado el presentador Jesús Vázquez. En realidad no es nada distinto a lo que ocurre en todas las aulas a diario. Las escuelas han dejado de ser lugares de estudio y formación para convertirse en lo más parecido a una selva donde el profesor, desprovisto de autoridad, hace lo que puede. Es lo que pasa cuando se acumulan muchos ejercicios sin educar en el no.