Sr. Director:
Las elecciones ecuatorianas del domingo 15 cada vez más se parecen a la primera ronda peruana. Al igual que Humala, el chavista Rafael Correa pasa de casi nada a liderar las encuestas.
La izquierda democrática ecuatoriana de León Roldós tiene un juego similar al de sus compañeros apristas: no aspiran a ganar en primera, sino en impedir que en ésta la victoria de los bolivarianos no sea grande y que la derecha no clasifique para el balotaje. Como Alan García, el objetivo es pasar de ser segundo en primera ronda para quedar primero en segunda vuelta.
Los socialcristianos ecuatorianos, como sus pares peruanos, llevan a una mujer de candidata (Cynthia Viteri), la cual pelea el tercer puesto con el conservador Álvaro Noboa.
En los dos lados de la Cordillera del Cóndor la tragedia de las fuerzas del centro a la derecha es que si se unen pudiesen pasar a la segunda vuelta, pero a costa de producir tal polarización que varios centroizquierdistas pudiesen encumbrar a los antiimperialistas. Al final pueda que sigan el camino peruano o tico llevando al poder como mal menor a la socialdemocracia.
Isaac Bigio
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