Al empezar un nuevo curso me parece conveniente hacer un comentario sobre el acoso escolar, entre alumnos y hacia el profesor, aparece a edades cada vez más tempranas, con casos a los siete añosem>Si es delito el acoso sexual, laboral, inmobiliario, ¿por qué no el escolar? Se ejercería más y mejor control por parte de las autoridades. Sin olvidar que la responsabilidad última de la educación de los hijos recae en los padres, que deben ser capaces de formar en valores a sus retoños y de actuar cuando se salten esos principios, es imprescindible exigir respeto a los compañeros y especialmente a los profesores. Hace unos días leía lo que decía un chico joven de origen extranjero que vive en un barrio marginal de Barcelona pero que ha tenido relación directa con gente formada, decía: "Si no respetan al profesor, ¿cómo pueden aprender?". Ciertamente, hay mucha mayor dificultad, no sólo en ellos sino en todos los compañeros de clase. Sobre el acoso a los compañeros podemos preguntar ¿Quien no se sienta comprendido y a gusto en el colegio, cómo va aprender?
Jesús Martínez