Que el Defensor del Pueblo reciba insultos de representantes del PSC, CiU, IU y ERC por presentar un recurso de inconstitucionalidad al Estatut demuestra escasa talla moral y política de los representantes de esas fuerzas. Pero que lleven al asunto al Congreso para aprobar una eventual reprobación, es un atropello en palabras del PP. Y esto es lo que ha ocurrido en la mañana de este martes.
Tremendo. Resulta que el Defensor del Pueblo hace uso de sus competencias constitucionales y no sólo es insultado, sino reprobado por el Parlamento. ¿Es esto respeto institucional que tanto predica el gobierno? Por otra parte, conviene recordar que Múgica presenta el recurso entre otras razones- porque el nuevo Estatut retira sus competencias de los ciudadanos residentes en Cataluña, que sólo se verán protegidos por el Defensor del Pueblo catalán. Y por supuesto, Múgica no quiere ver mermadas sus competencias. Una cosa es la cooperación y la colaboración y otra una extralimitación que limita las garantías de los ciudadanos catalanes y quiebra la unidad entre todos los españoles.