El Banco de España, por boca del director general de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, ha manifestado este miércoles que los pisos de las viviendas todavía deberían descender otro 10% para alcanzar su valor real, por lo que la crisis habría depreciado los precios en un 30% si se llega a ese nivel. Pese ese porcentaje es todavía menor que el esperado para el suelo, ya que el descenso acumulado sería en este caso de entre el 45% y el 50%.
Ante esta situación y el desempleo generado por los despidos en la sección de la construcción, Malo de Molina ha señalado que es necesario que otros sectores absorban a este grupo de trabajadores, y como se viene insistiendo desde la patronal, se flexibilice el mercado de trabajo y de la economía para que esto se pueda llevar a cabo.
También ha aprovechado su comparecencia en la Conferencia Inmobiliaria 2011 para presentar algunas propuestas que favorecerían un cierto despegue del sector, como modificar los incentivos de viviendas, tanto en propiedad y alquiler para dar salida a los excedentes y resolviendo las necesidades de la población, un mejor plano fiscal y regulatorio, así como datos estadísticos homogéneos.
Eso sí, mientras los bancos sigan manteniendo sus stocks de viviendas a la espera de que los precios vuelvan a subir, nada de esto se podrá poner en práctica.
Juan María Piñero
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