Sáenz señala que están por debajo de la media del mercado español intencionadamente

Ante la pregunta recurrente sobre los riesgos inmobiliarios del banco, Sáenz señala que la exposición al riesgo del banco es muy baja porque deliberadamente han levantado el pie del acelerador tanto en segunda residencia como en costa. "Hemos crecido por debajo del mercado conscientemente". En todo caso, el consejero delegado del Santander señala que no han observado ningún repunte de la morosidad, "ni que el mercado se haya estropeado". Sáenz añade que no tienen indicios ni en la desaceleración de la demanda de créditos ni en los precios ni en un ‘loan to value' exagerado. Más bien Sáenz se "compra" la tesis del FMI de desaceleración suave en volumen y precios. Eso sí, casi el 50% del balance del Santander es hipotecario y el impacto de promotores asciende al 6%.

En cuanto al reporte en la tasa de cobertura de 12 puntos, Sáenz destaca que tiene un "valor relativo y contable", ya que no sólo hay que tener en cuenta la tasa de morosidad, sino también la prima de riesgo, la tasa de morosidad ha descendido ligeramente hasta colocarse en el 0,83%, mientras que con la prima de riesgo lo que han hecho –explica Sáenz- es pasar los morosos rápidamente a fallidos con el fin de penalizar a la división y que se preocupe más de la calidad del crédito. Por otra parte, hay que tener en cuenta que hay negocios con primas de riesgo altas, pero márgenes elevados. Dos ejemplos: el primero, las tarjetas de crédito de México. Han incrementado su prima de riesgo del 7 al 10%, pero la "segunda pata" es el margen: un 20% neto de provisiones. Lo mismo ocurre con el negocio de Drive recién incluido en el perímetro del banco. La prima de riesgo es de un 20%, pero el margen "lo paga con creces". Conclusión: hay mucho más de contabilidad que de sustancia.