El empeño de Manuel de Castro, presidente de la Federación Española de religiosos de la Enseñanza, en apoyar al Gobierno Zapatero remarca una idea que, poco a poco, se va abriendo paso (y ya es hora): la enseñanza concertada atenta contra la libertad de enseñanza, y ésta sólo está representada por el cheque escolar.
La izquierda política está por la escuela pública, regida por funcionarios. La derecha política opta por los concertados, aunque eso reduzca su libertad hasta unos límites peligrosos (por ejemplo, no olvidemos que a los profesores de la enseñanza religiosa les paga el sueldo el Estado). Pues bien, el cheque escolar es la opción que quita el poder, por un lado, a los sindicatos, funcionarios y ministerio de Educación (o consejerías de educación) por otro, se lo quita a los empresarios de la enseñanza, clérigos o laicos… y se lo otorga a los padres. La campaña de Hazteoir.org merece reseñarse.